Cómo ayudar a los niños a usar el nebulizador

Cómo ayudar a los niños a usar el nebulizador

Un nebulizador transforma el medicamento en un vapor o partículas muy finas a fin de que tu hijo lo inhale a través de los pulmones. Los nebulizadores se suelen utilizar con niños pequeños porque requieren poco esfuerzo por parte de ellos, pero deben permanecer sentados en el mismo lugar y cooperar.

La mayoría de los nebulizadores vienen provistos de una mascarilla facial. El niño se coloca la mascarilla y respira normalmente durante 5 a 10’ hasta que se acaba el medicamento. Si el niño no coopera, es posible que no obtenga la dosis adecuada de medicamento. Por ejemplo, si la mascarilla se coloca a 1,30 centímetros del rostro del niño, la mitad de la dosis de medicamento no le llegará a los pulmones.

Puede dar la impresión de que, cuando un niño está llorando, hace inspiraciones más profundas, lo que puede llevar a un padre o una madre a pensar que su hijo inhalará el medicamento más profundamente mientras llore, pero ocurre justamente lo contrario. El llanto es una larga exhalación seguida de una inhalación muy rápida, que no permite que llegue suficiente aire a los pulmones.

Si tu hijo es todavía bebé puede utilizar el nebulizador mientras el pequeño esté durmiendo, o es posible que coopere mientras lo tenés en brazos. Pero, ¿con bebés mayores o niños de pocos años? Es posible que la mascarilla lo asuste y se resista a quedarse quieto.

Sugerencias para que el uso del nebulizador resulte más fácil y divertido:

  • Hacé que el uso del nebulizador forme parte de la rutina diaria. Usalo a la misma hora cada día, para que tu hijo sepa qué puede esperar.
  • Si a tu hijo le asusta la mascarilla podés contarle que es una «máscara de piloto de avión». También podés mostrarle videos sobre viajes espaciales y usar una frase especial para crear ambiente, como «pongamos el motor en marcha» antes de conectar el nebulizador.
  • Dejá que tu hijo decore el nebulizador con stickers.
  • Hacé que el tiempo durante el cual tu hijo tenga que estar sentado sea lo más divertido posible. Leele cuentos o sacá algún juguete especial reservado sólo para cuando utilicen el nebulizador.
  • Si tu hijo es más grande animalo a que te ayude, por ejemplo, encendiendo el dispositivo.
  • ¡Felicitá a tu hijo por el trabajo bien hecho!

 

 

Fuente: kids health