Maternidad: cómo son los primeros meses

Un nuevo y pequeño integrante llegó a la familia y todos quieren brindarle los mejores cuidados.
En esta nota, una guía de orientación con el ABC para atender los requerimientos del bebé.

Para comprender mejor…
La llegada de la cigüeña genera grandes cambios en la rutina y los hábitos del hogar. Es que el bebé requiere – cuidados y – un ambiente muy amigable. Para ello, la familia tiene que estar preparada para interpretar cuáles son las necesidades del niño y cómo proceder para alimentarlo, bañarlo o hacerlo dormir. Para lograr un clima confortable será importante evitar los cambios bruscos de temperatura, elegir música especial para relajarlo y mantener una fluida comunicación tanto a través de las palabras, como de las caricias y de la mirada.
Este nuevo miembro exige redoblar los controles de limpieza e higiene en el hogar. Las manos esconden muchas bacterias, a esto se agrega que los bebés son sumamente
sensibles a la contaminación. Por esta razón, hay que lavarse las manos antes de tener contacto con el bebé, como así también esterilizar todos los objetos que estén a su alcance como el chupete, la mamadera y los sonajeros.

El bebé se sentirá muy a gusto durante su sesión de baño. Es lógico: durante nueve meses vivió en un medio líquido muy placentero. A pesar de lo agradable que suele ser este momento, se deben tomar ciertos recaudos:

– Mantener una temperatura estable, tanto del agua como del ambiente (sin cambios bruscos),

– Utilizar productos especiales para bebés como champúes y jabones neutros ya que sus fórmulas están específicamente diseñadas y evitan la irritación de la piel.

– No dejar nunca solo al bebé mientras esté en el agua.

La piel de los recién nacidos es muy delicada y se encuentra más expuesta a las paspaduras y las erupciones. Es muy común, la aparición de la dermatitis del pañal -irritación en la colita- que puede prevenirse cambiando los pañales cada tres horas y limpiando la superficie con óleo calcáreo o con toallitas húmedas (siempre que sean hipoalergénicas y sin alcohol). Al mismo tiempo, los médicos aconsejan vestir al bebé con ropa de algodón, dejando a un lado la de nylon o lana. Estas últimas nunca deben usarse en contacto directo con el cuerpo del niñito pues pueden provocar alergias.

Leche materna
La leche materna es el único alimento que posee todos los nutrientes que necesita un bebé. Es por este motivo que los especialistas recomiendan que el niño tome el pecho en forma exclusiva hasta los seis meses. Después de los 6 meses y hasta el año, puede mamar en forma parcial e incluir en su dieta alimentos sólidos.
A partir de los nueve meses se puede comenzar el destete. Para que resulte totalmente efectivo, este proceso debe ser gradual.
La Academia Americana de Pediatría aconseja que «las leches infantiles fortificadas con hierro son la única alternativa aceptable» para los bebés que no pueden ser amamantados.
Los cólicos son muy comunes en los bebés. Se asocian al aire incorporado cuando maman y a la falta de maduración del intestino.
Unos suaves masajes circulares sobre la pancita del bebé y/o ejercicios tipo «Bicicleta» con sus piernitas, pueden ayudarlo
a expulsar gases.