Antioxidantes: Agentes protectores

Antioxidantes: Agentes protectores

Tal vez usted es una de esas personas que debido a las exigencias modernas llegue un estrés permanente, poco descanso y una alimentación que no cubre adecuadamente las necesidades vitamínicas. Tal vez se encuentre desganado o simplemente esté preocupado por el pasar del tiempo. Si consideró la posibilidad de tomar algún suplemento vitamínico, se habrá topado seguramente con “antioxidantes”

Pero, ¿que son y para qué sirven?
Son sustancias que reaccionan neutralizando, atrapando los radicales libres, quienes afectan nuestro organismo actuando directamente sobre la estructura de las células. Estos radicales surgen de factores ambientales externos e internos como herbicidas, combustión, la luz UV, tabaco, bacterias, virus, etc. Los antioxidantes ayudan a reducir los niveles de colesterol en sangre, protegen el sistema inmunológico, disminuyen el riesgo de cáncer y enfermedades vasculares, previenen el envejecimiento prematuro de las células ayudando en enfermedades vasculares, previenen el envejecimiento prematuro de las células ayudando en enfermedades tipo Alzheimer, y disminuyen los procesos inflamatorios como artritis y asma; mejoran la visión y la piel. Si bien nuestro organismo cuenta con medios para hacerles frente a estos radicales, en ocasiones no son suficientes y debemos contar con un aporte extra de antioxidantes.

¿Cuáles son? ¿Dónde los encontramos?


Fundamentalmente en el reino vegetal, hortalizas, legumbres, frutas y cereales. Los más importantes son los caroteno idees, como licopeno, betacatoreno y luteína, las vitaminas A, C y E; y otros minerales en los que se destaca el selenio. Los carotenoides son un tipo de pigmentos naturales, se encuentran en las verduras y frutas de colores verdes intensos, amarillos y rojos. Se recomienda comer de todos los colores. El contenido de carotenos puede varias en parte debido a la madurez de la fruta y hortaliza, a la estación y también por su forma de preparación. Por ejemplo, los de la zanahoria se absorben más cocidas que en crudo. También abundan en el tomate, pomelo rosado y sandia se recomienda su consumo para prevenir cáncer de próstata, pulmón, vejiga,

La vitamina C ayuda a potenciar los efectos de la vitamina E, en la prevención de la oxidación del colesterol y formación de la placa de ateroma. La encontramos en frutos cítricos, frutillas, kiwis, vegetales verde oscuro.

La vitamina E, es en realidad un grupo de sustancias conocidas como tocoferoles, por disolverse en grasas se cuelan en las membranas celulares y serian como escuderos en el frente de batalla. Abunda en frutos secos oleaginosos y germen de trigo.

El selenio actúa formando parte de una enzima. Se encuentra en carnes, viseras, pescados y cereales.

No todo es tan malo:

Aunque los radicales libres suelen causar daños a nuestros tejidos, hay algunas situaciones en las que son beneficiosos. Por ejemplo, las células del sistema inmunitario a menudo eliminan a los agentes infecciones con bombardeos de radicales peróxido (tipo agua oxigenada), también la quimioterapia hace uso de radicales libres. El problema se presenta cuando hay un exceso y el cuerpo no puede barrer con ellos.

A tener en cuenta:

Si bien los antioxidantes son buenos, existe un equilibrio para todo. Recordemos que ellos nos protegen por neutralizar radicales libres, lo hacen cediendo sus electrones, convirtiéndose ellos en radicales, más estables, pero radicales al fin; que nuestro cuerpo deberá eliminar.

Lo ideal sería incorporarlos con nuestra dieta haciéndola cariada y balanceada, y consultar con un profesional si quiere suplementarios.

Alejandra C. Elliff Altarriba
Bioquimica – Farmaceutica