Antiácidos
La acidez es una sensación de ardor o quemazón en la boca del estómago.
Normalmente, luego de que los alimentos se mastican y son tragados, pasan por el esófago, entran al estómago y una banda muscular impide el contacto del contenido entre ambos órganos. Si este músculo no logra cerrarse bien, el contenido del estómago puede retornar o refluir al esófago. Este material parcialmente digerido generalmente es ácido y puede irritar el esófago, causando acidez y otros síntomas.
La acidez puede ser ocasional o frecuente, según la repetición de veces que uno la padezca. Si se produce 2 o 3 veces por semana, se habla de acidez frecuente.
Se recomienda que el que la padece modifique sus hábitos alimentarios y actividades para disminuir sus síntomas. Los antiácidos pueden ayudar a calmar estos síntomas regulando el Ph gástrico, neutralizando parcialmente el ácido estomacal y proporcionando un rápido alivio.
Hepatoprotectores
Cuando comemos, no sólo es importante la calidad de los alimentos, sino también la forma en que nuestro cuerpo los digiere y absorbe. Si estos procesos funcionan mal, se producen malas digestiones que pueden generar gases, dolor, pesadez, hinchazón abdominal, entre otros problemas. El hígado produce bilis, una sustancia líquida alcalina que interviene en los procesos de digestión funcionando como emulsionante de los ácidos grasos. Cuando comemos algo que tiene muchas grasas, el cuerpo libera bilis, pero si la cantidad de grasas es muy alta, la bilis que libera es insuficiente. Por eso, nos sentimos hinchados. Los hepatoprotectores alivian los síntomas de sensación de pesadez después de comer porque ayudan al proceso digestivo
Ante cualquier duda consulte a su médico y/o farmacéutico. Fuente: Hepatalgina y Aziatop